Cierra los ojos e imagina como eran las ciudades en la Edad Media, ¿Cuál es la primera imagen que te viene a la mente?; Seguro que es la de una esbelta y robusta muralla que cierra todo un núcleo de población a modo de ciudadela.
Ahora continua con la lectura de este artículo en el que descubrirás la bonita ciudad de Ávila y su recinto amurallado, el mejor conservado de España tras la Reconquista y una de las pocas del mundo que se conserva prácticamente íntegra junto a la de su vecina Segovia y la de Lugo.
Algunos datos de la muralla de Ávila.
Con un perímetro de 2516 metros, rodea una superficie de tres hectáreas, lo que constituye uno de los recintos amurallados mejor conservados del mundo.
Tiene 9 puertas de acceso, 87 torreones, y unos 2500 merlones (la parte no hueca de las almenas). La forma semicircular de sus torreones evitaba la aparición de huecos muertos a la hora de disparar.
Sus muros tienen 3 metros de grosor y unos 12 metros de altura. Se trata de un muro doble, interior y exterior relleno de materiales, siendo el interior más bajo y el exterior sucedido de almenas y merlones.
Algunos de los materiales con los que se construyó fue la roca de granito con formas irregulares niveladas con materiales más finos, una mezcla de cal y arena o mampostería.
La muralla abulense posee un perímetro de más de 2500 metros, 9 puertas de acceso y 87 torreones, lo que la convierte en una de las más grandes y mejor conservadas del mundo.
Fue construida a finales del siglo XI, época en la que el monarca Alfonso VI acababa de conquistar Toledo a los musulmanes (año 1085). Es a partir de esta fecha cuando comienzan las tareas de repoblación de las ciudades de Ávila, Salamanca y Segovia.
Se han encontrado algunos vestigios de la muralla de la época romana. En algún tramo encontraremos restos de “cistas” incrustados en la muralla, una forma de enterramiento que consistía en cuatro losas laterales y una quinta que hacía de cubierta.
Con el paso del tiempo y ante la inutilidad para la que fue construida la muralla, como sistema de protección, se pensó en desmantelarla. Afortunadamente esta idea no llegó a materializarse y en la actualidad sigue en pie para nuestro disfrute.
Las entradas principales a la ciudadela se encuentran en la Puerta del Alcázar y la Puerta de San Vicente, ambas formadas por dos grandes torreones unidos por un puente.
También es muy bonita la Puerta del Carmen que cuenta con un campanario encima procedente del antiguo Convento del Carmen del siglo XVII, que tras su estado semiruinoso se decidió desmantelar para colocar su campanario sobre la muralla.
Las edificaciones que divisamos enfrente constituían lo que se conocían como arrabales del norte y era la zona donde habitaban los molineros, artesanos y hortelanos, gente trabajadora y humilde. Aquí se ubica una ermita románica del siglo XII dedicada a San Segundo, patrón de la ciudad. Los restos del santo fueron trasladados a la Catedral para su conservación en el siglo XVI, ya que la zona tenía mala fama por albergar un prostíbulo, la zona de cueros con olores nauseabundos y un molino muy ruidoso.
Otra de las puertas, más pequeña y de difícil acceso es la Puerta de la Malaventura, que daba acceso a la aljama o barrio judío. En 1492 la mayoría de abulenses judíos que no optaron por la conversión al catolicismo fueron forzados a dejar España según habían dictado los Reyes Católicos. Tras cruzar esta puerta nos encontramos con un jardín dedicado a Moshé ben Shem Tob de León, sabio rabino y gran místico autor del “Libro dels Esplendor” o “Zohar”.
Por si no lo sabías, Ávila pertenece al grupo de ciudades y pueblos de España que componen la Red de Juderías de España. Estas localidades que cuentan con un legado de la cultura sefardí ofrecen un interesante producto turístico: “Caminos de Sefarad”.
Os animamos a visitar su web y completar el salvoconducto de las ciudades y pueblos que forman parte de la ruta.
¿Es gratis visitar la muralla de Ávila?.
Pasear por el entorno de la muralla no te costará ni un céntimo, pero es posible también visitarla desde su parte superior, una distancia de algo más de 1 kilómetro. El coste de la entrada es de 5€ con un horario de 10:00 a 18:00 h en invierno y hasta las 21:00 h en temporada estival.
¡Apúntate esta!: Los martes de 16:00 a 18:00 la entrada es totalmente gratis.
¿Dónde podemos obtener la mejor vista de la muralla?.
La mejor vista de las murallas y del skyline de la ciudad es desde Los 4 Postes. Aquí comenzó nuestro primer contacto con Ávila, obteniendo una hermosa panorámica de la misma.
Se encuentra a las afueras, cruzando el río Adaja a unos 500 metros.
Como anécdota cuenta la leyenda que desde este lugar Santa Teresa sacudió sus zapatillas y prometió no volver nunca jamás.
La mejor forma de visitar la ciudad es con una visita guiada. Puedes reservar tu plaza para hacer un Free Tour por Ávila a través de este artículo. ¡No te quedes sin tu plaza!.
Qué ver en Ávila además de la muralla.
Podemos empezar a recorrer el interior de la ciudad desde la Plaza Mayor o Plaza del Mercado Chico. En esta animada plaza se monta cada viernes por la mañana un animado mercado de frutas y verduras. Bajo sus arcos porticados se instalan tiendecitas de souvenirs donde podrás adquirir las deliciosas “yemas de Ávila”.
Entre sus edificios más notables encontramos la Casa Consistorial que data de 1865 y la Iglesia de San Juan Bautista, románica en su origen aunque reformada durante el siglo XVI. Aquí fue bautizada Santa Teresa de Jesús. En su puerta se reunía el concejo antes de crearse el Ayuntamiento.
Otra plaza con nombre contrapuesto a la anterior es la Plaza del Mercado Grande, frente a la Torre del Homenaje del Alcázar, ya en el exterior del recinto amurallado. Es un lugar muy concurrido para salir a tapear por la ciudad. Frente a ella se ubica la Iglesia de San Pedro. Se trata de un bonito templo románico construido en la primera mitad del siglo XII. Destaca por su portada de la fachada norte. En su interior encontraremos obras de arte como el retablo de la Capilla Mayor y altares renacentistas en madera blanqueada.
Paseando por la ciudad encontraréis diferentes alegorías a Santa Teresa de Jesús, nacida el 28 de marzo de 1515. Así reza la fecha en el solar que antes ocupara la casa natal de esta mujer, mística y escritora que llegó a ser Santa por la Iglesia Católica, tan sólo 40 años después de su muerte. A modo de anécdota esta ilustre Santa aparece en el capítulo 13 de la décima temporada de Los Simpsons.
Teresa de Jesús fue una mujer humilde, que hizo una importante Reforma de la Orden de las Carmelitas Descalzas. Es toda una institución para los abulenses.
En este lugar se levantan el Convento y Museo de Santa Teresa de Ávila, construido a principios del siglo XVII en estilo barroco. Su fachada parece un auténtico retablo construido en piedra. A la Santa se la representa con sus atributos, una pluma y un libro, como doctora de la Iglesia. Este título le fuer otorgado en 1970 por el Papa Pablo VI.
Si de algo puede presumir Ávila, además de murallas, es de su elevado número de palacios nobles, muchos de ellos del siglo XVI, repartidos por la ciudad intramuros, la mayoría dotados de un uso hostelero o como oficinas, pero conservados en un buen estado.
Entre los más bonitos destacamos los siguientes:
- Palacio de los Velada (Plaza de la Catedral, 10), hoy en día convertido en un hotel de lujo. Merece la pena acercarse y tomar algo en su patio que cuenta con un techo acristalado sin necesidad de estar alojado. Muy cerquita hay otro edificio palaciego convertido en hotel, el Palacio de Valderrábanos.
- Palacio de los Verdugo (Calle López Núñez), mandado construir por Don Suero de Águila, caballerizo del Infante Don Fernando, (Fernando I), hermano de Carlos I.
- Palacio de los Superunda, en estilo renacentista y con fachada de granito flanqueada por dos torres. Acoge el Museo Caprotti.
- Palacio de los Guzmanes (Plaza del Corral de las Campanas). Destaca la torre cuadrangular renacentista con atalayas en las esquinas denotando su carácter defensivo. El sótano acoge un museo permanente sobre la cultura Vetona, antiguos pobladores de la época prerromana.
- Palacio de los Dávila. La muralla estaba compuesta por un segundo cinturón defensivo constituido por los palacios de la nobleza y el clero que permitirían la defensa de incursiones del enemigo en la ciudad. Éste es un buen ejemplo de palacio fortificado adosado a la muralla. Por detrás de la muralla encontramos una antigua puerta tapiada.
- Palacio de Núñez Vela, mandado construir en estilo renacentista por D. Blasco Núñez Bleda, primer virrey de Perú.
Sobre la muralla podemos observar vestigios de la cultura Vetona, como cabezas de berraco incrustadas como elemento de protección. Estos elementos se colocaban a la entrada de los castros para proteger prados y necrópolis. Otras versiones sobre esta cabeza de animal la relacionan con la mula de San Pedro y el lugar donde está enterrada frente a la puerta de San Vicente.
La Torre de los Guzmanes fue residencia temporal del rey Alfonso XII. Actualmente alberga en lo que fueran las caballerizas un museo sobre la cultura Vetona, antiguos pobladores celtas del centro de la península en época prerromana.
Los amantes de las catedrales encontrarán en la Catedral de Cristo Salvador, construida a 1131 metros de altitud, un templo muy singular a modo de Iglesia-Fortaleza. Esta catedral se construyó alrededor del siglo XII en estilo gótico. Su construcción se dilató a lo largo de tres siglos.
Como curiosidad os llamará la atención el color gris de su piedra, construida en sillares de granito. Se encuentra adherida a la muralla siendo sus muros parte de la fortificación. Es por ello que este templo tuvo dos funciones: iglesia y fortaleza defensiva. Su ábside está literalmente incrustado en la propia muralla.
Otra curiosidad es que permanece inacabada y tapiada con ladrillo. En un principio se planeó construir dos torres gemelas, pero tanto el Vaticano como la UNESCO no se ponen de acuerdo para su finalización.
El precio de la entrada es de 5€ y no se puede visitar durante los oficios.
Otro de los templos a destacar es la Basílica de San Vicente, declarada Monumento Nacional en 1923. Se trata de un templo románico construido entre llos siglos XII y XIV, uno de los más bellos de España. Destaca de su exterior la parte porticada con sus tonos rojizos producto de su construcción con “piedra caleña” extraída de Villamayor en Salamanca.
En el interior encontraremos el Cenotafio de los Santos Hermanos Mártires (Vicente, Sabina y Cristeta).
¿Cuando visitar Ávila?.
Cualquier estación del año es propicia para visitar esta interesante ciudad castellana. No obstante hay que tener en cuenta las temperaturas extremas en algunos meses. En verano a las horas centrales del día puede llegar a hacer bastante calor mientras que en los meses más duros de invierno suele nevar y haber temperaturas a varios grados bajo cero.
En cuanto a fechas destacadas hau varias a lo largo del calendario de eventos festivos y culturales. Las procesiones de Semana Santa son muy interesantes y están declaradas de Interés Turístico Internacional desde el año 2021.
Durante la primera semana de septiembre se celebran las Jornadas Medievales. En agosto se celebra el Festival Internacional de Circo en el que las plazas de la ciudad se llenan de espectáculos circenses.
Podéis ampliar información sobre eventos de la ciudad en la Web Oficial de Turismo de Ávila.
Una ciudad fascinante, la muralla es una pasada y tiene un rico patrimonio.
Ávila es una maravilla, tiene muchas cosas qué ver.
Ávila es una de las imprescindibles en una escapada desde Madrid.
Queda muy cerquita de la capital.