Algunos árboles singulares de la Comunidad Valenciana.

Árboles singulares en la Comunitat Valenciana

Los árboles monumentales o singulares son testimonio vivo de algunos de los acontecimientos más importantes de nuestro entorno. Su notoriedad puede ser debida a diversos motivos como su antigüedad, su tamaño, su armonía, su rareza dentro de su especie,…

Pero no sólo se recogen los árboles como tales sino también los arbustos u otros ejemplares no arbóreos de dimensiones destacables que encierran un importante significado histórico o simbólico y aquellos que recogen tradiciones religiosas o sociales o presentan un alto valor etnoagrario o etnobotánico.

Los árboles son nuestros amigos 🙂

Se puede decir que son los seres vivos más longevos de nuestro planeta Tierra, algunos incluso llegan a ser milenarios. Es por ello que representan un patrimonio natural, pero también cultural de un valor incalculable, motivo más que suficiente para ponerlos en valor y de este modo que disfruten de una figura de protección.

Las distintas comunidades autónomas cuentan con un catálogo de árboles y otras especies árboreas protegidas por su singularidad. Castilla y León es la cuenta con más ejemplares, un 25% aproximadamente de todo el territorio español. En nuestro caso, la Comunitat Valenciana contaba en el año 2020 con 153 ejemplares.

En este artículo hemos recopilado 9 ejemplares singulares dentro del territorio de la Comunitat Valenciana con la colaboración de 3 blogs de viajes amigos.

En el mapa adjunto podéis ver cada uno de los árboles monumentales:


1.) La Carrasca de Culla (Castellón de La Plana).

La Carrasca de Culla es un árbol monumental del siglo XVI, reconocido como tal en 1988 por la Generalitat Valenciana. Está situado en la misma carretera que va de Culla a Torre d´En Besora, en la Masía Clapés de propiedad particular.
Esta carrasca es posiblemente la más grande de España con una altura de 24 metros y un tronco de 7 metros de diámetro. Cuentan que ha sido superviviente de antiguos bosques que han ido desapareciendo convertidos en carbón, naves para la flota de la armada española en el siglo XVIII o por la transformación de los terrenos. En frente hay un área de picnic y al lado un restaurante.

Carrasca de Culla. Foto: Santi de «A mamá le gusta viajar»
Foto de «A mamá le gusta viajar»

Las fotografías y el texto son propiedad de nuestros amigos del blog «A mamá le gusta viajar». Os invitamos a pasaros por su blog donde encontraréis multitud de planes para hacer en família.


2.) El Pino Tío Manolo de Aigües (Alicante).

Nuestros compis de «Con los niños en la mochila» nos envían la curiosa historia de este viejo pino. No olvidéis visitar su interesantísimo blog repleto de rutas e ideas muy chulas para grandes y pequeños.

«Me encanta la naturaleza y descubrir las maravillas que nos ofrece. Y entre esas maravillas, están los árboles singulares o monumentales. Sí, los árboles, esos que son vitales para nuestra existencia y a los que no solemos dar la importancia que se merecen. Esos cuya existencia es tan frágil, pero que en algunas ocasiones nos sorprenden resistiendo ante todo y ante todos convirtiéndose en testigos silenciosos del paso del tiempo… Pues resulta, que tengo uno de esos ancianos que pasa casi desapercibido muy cerquita de casa. Y tiene nombre propio.

Pino tío Manolo en Aigües
Foto del Tío Manolo del blog de «Con los niños en la mochila».


Adentrándonos desde el mar a la montaña, justo a la entrada de la localidad de Aigües, nos encontraremos con Manolo. Manolo, que así se llama este precioso árbol, es un pino centenario. Lo encontraréis justo frente a la piscina municipal de la localidad,  al borde la de CV-775 que une El Campello con Aigües. Este pino tiene unos 10 metros de altura. No se cuanto medirá el tronco, pero yo quería darle un abrazo, pero para rodearlo habrían hecho falta 3 como yo. Y su copa es realmente espectacular. Bajo su sombra hay unos bancos de piedra que invitan a sentarse.
Nadie sabe con seguridad por qué se llama así. Unos dice que en memoria del hombre que lo plantó y al que todos conocían como el «Tío Manolo». Otros que era el lugar donde siempre podías encontrar al «Tío Manolo» descansando. Sea como fuere, lo importante es que allí está Manolo desde hace unos 145-150 años aproximadamente dándonos su sombra. La de historias que podría contarnos…»


3.) L’olivera de L’Alfàs en Finestrat (Alicante).

Este precioso ejemplar de olivo nos lo envían nuestros colegas de «Más allá de la ciudad». Todo amante de la naturaleza y las actividades al aire libre tienen que conocer este blog sin falta.

Se encuentra en la Partida de L’Alfás (Finestrat, Alicante), pegado a un viejo camino que comunicaba los dos pueblos de la Marina Baixa. Se trata de un ejemplar de 7 metros de altura, más de 6 metros de perímetro y una copa de casi 15 metros. 
Junto a ella se encuentran varios ejemplares que deben tener una edad parecida ya que parece que todas se plantaron en la misma época aunque a esta se le atribuyen más de 350 años (según el Catálogo de Árboles Monumentales de la Comunidad Valenciana, donde está incluido este ejemplar desde 2012) y es la que ha tenido un crecimiento de tronco más espectacular. 

La olivera de L´Alfàs. Foto de Fran de «Más allá de la ciudad».


4.) El Olmo de Navajas (Castellón).

Este precioso ejemplar de olmo se encuentra en el centro neurálgico de la población castellonense de Navajas. Fue candidato a Árbol del Año en 2019 representando a España a nivel europeo. Resultó ganador en la votación abierta.

Justo delante podemos leer en una placa “ Este Olmo fue plantado por Roque Pastor en el año 1636”. Su plantación respondió a la necesidad de afirmar y reforzar lazos entre los nuevos repobladores cristianos tras la expulsión de los moriscos, teniendo como símbolo al olmo.

Como curiosidad podemos apuntar que forma parte del escudo de la población.

Olmo de Navajas

Puedes leer más sobre esta atractiva localidad de las comarcas de interior de Castellón en nuestro artículo: El Salto de la Novia de Navajas y su trágica leyenda de amor.


5.) Plátano de somba en Ribarroja del Túria (Valencia).

Se trata del tercer árbol más alto de la Comunitat Valenciana con 37 metros conocido vulgarmente como “L’Om de Traver” por los lugareños.

Según la tradición oral fue plantado a finales del siglo XIX en el paraje del Mas de Traver. Su ubicación junto a un pozo ha servido desde siempre un reclamo para celebrar las salidas campestres de Pascua a cobijo de su sombra.

Plátano de sombra en Ribarroja.


El árbol se encuentra a una distancia de unos 60 metros del río Túria y a pesar de su proximidad ha ido superando todas las inundaciones del río a lo largo de la historia(como la de 1957). También ha sobrevivido a la amenaza de los grandes incendios que se han dado en sus proximidades (como el de la Vallesa en 1994) pero sobretodo a las actuaciones antrópicas relacionadas con el PAI de Traver y los procesos urbanísticos que amenazaron su hábitat a principios del siglo XXI.
Fue finalista a Árbol del año en la edición del 2018.


6.) Garrofera del Bovalar en Alaquàs (Valencia).

El algarrobo (Ceratonia siliqua), en valenciano garrofera, es uno de los árboles mediterráneos más emblemáticos de la Comunidad Valenciana. Este ejemplar de más de 400 años mide 9 metros de altura y tiene un perímetro de tronco de más de 6 metros.

Uno de los primeros documentos que hacen referencia a cultivos de algarrobos en el término de Alaquàs data del siglo XVI ordenado por el señor de Alaquàs en 1577 en el que figuran cuatro parcelas de algarrobos de al menos 38 hanegadas en el Bovalar de Alaquàs. Este ejemplar es el único superviviente del Bovalar que se conserva en la actualidad.

Algarrobo de Alaquàs

Su importancia histórica se debe por tanto a su estrecha relación con los cultivos señoriales del Castillo de Alaquàs (S.XVI), monumento declarado como Bien de Interés Cultural y desde 1918 Monumento Histórico Artístico Nacional.
En el año 2021 fue finalista a Árbol del Año.


7.) Algarrobo de Foia Brell en Alfàs del Pí (Alicante).

El algarrobo de Foia Brell se sitúa entre la partida carbonara y la partida cautivador del término municipal de Alfàs del Pi. El nombre de la partida carbonara se debe a que antiguamente era una zona donde se hacía carbón con las carrascas, y la partida el cautivador se debe a que antiguamente era una zona donde se aprisionaban a los enemigos que atacan la población.

Este ejemplar de 8 metros de altura y 800 años de antigüedad tuvo un papel fundamental en la posguerra. La gran cantidad de algarrobas que producía sirvió para alimentar a muchas familias alfasinas durante esta terrible época de hambruna. Del mismo modo sirvió para alimentar el ganado y abonar los campos.

Algarrobo de Alfàs del Pi.

Hay un dicho que dice que «si vuelve la guerra nos metemos dentro de un algarrobo”, esto se debe a que esta especie les trasmite seguridad para poder sobrevivir y para poder solucionar muchos problemas.


8.) El Pi de La Baia, Elche (Alicante).

La Baia es una pedanía ubicada al sureste del término municipal de Elche. El pino es centenario y mide unos 7 metros. Fue finalista como Árbol del 2021.

Por su ubicación junto a la iglesia y el centro del pueblo, siempre ha sido punto de encuentro. Su sombra ha sido testigo de juegos, confidencias de juventud, reuniones de mayores, después de sus duras jornadas de trabajo en el campo. En una plaza donde se celebraban las verbenas en honor a San Andrés Apóstol, y en la que siempre se decoraba con bombillas y guirnaldas.

Entre las historias que este pino ha presenciado destaca el suceso de una serie de robos, allá por 1938, en los que el vecindario se tomó la mano de la justicia por su cuenta, y escarmentó a aquellos ladrones, utilizando el pino como verdugo, y que años después se volvió a repetir, haciendo popular en los alrededores, el dicho «en la Baya te veas», cuando se observaba alguna injusticia sobre alguien. Algunos periódicos de tirada nacional destacaban la noticia de los hechos en varias ediciones.


9.) La Palmera Imperial, Huerto del Cura de Elche.

En la categoría de palmera, que no de árbol, encontramos la Palmera Imperial de Elche, la joya del Palmeral de Elche.

Este raro ejemplar de palmera datilera (Phoenix Dactylifera) debe su nombre y fama a la Emperatriz Elisabeth de Austria (Sissi), a quien se la dedicó el capellán Castaño cuando ésta visitó el huerto en 1894. Sissí impresionada por la peculiaridad de la palmera se dirigió al sacerdote que cuidaba el huerto y le dijo: «esta palmera tiene un poder y una fuerza dignas del más grande imperio. Póngale un nombre célebre«. Recuerdo de esta visita es también el busto de la Emperatriz que podemos visitar en el jardín.

La Palmera Imperial es un ejemplar macho que cuenta con unos 180 años de edad. Su mérito como fenómeno botánico es que rompe con todas las leyes de la biología:

  • Los hijuelos, que son relativamente frecuentes, generalmente nacen en esta especie a nivel del suelo, cuando las palmeras tienen entre 10 y 15 años de edad, y éstos surgieron cuando la palmera padre tenía más de 30 años y a una altura nada común de 2 m., a gran distancia de las raíces, donde la savia es más escasa.
  • El gran número de hijuelos (7) y la perfección y simetría con que se desarrollaron. Uno de sus 7 brazos se secó en 2014, pero aún se puede observar su tronco alrededor del principal.
  • El tamaño colosal que tales hijos han adquirido después de más de 150 años, alimentándose todos a través de la savia que les llega de la palmera padre central.
Mª Ángeles en el Huerto del Cura.

Poco antes de 1900, el capellán Castaño le puso un soporte para evitar que el propio peso de los hijos hiciera que se separaran de la palmera central. Actualmente sobrepasa las 8 toneladas de peso y los 17 metros de altura. testables.

Si visitas Elche, nuestra ciudad, no puedes perderte algunos de nuestros artículos.


10.) La Morruda: olivera milenaria en Segorbe (Castellón).

Nuestra compañera Marina Soriano gran conocedora de la provincia de Castellón comparte con nosotros la historia de una milenaria olivera en Segorbe. Aprovechamos para recomendar su blog «Viajera Digiftal» donde encontrarás muchos consejos viajeros.

Esta espectacular olivera se encuentra cerca de Segorbe, un bonito pueblo del interior de Castellón, en la comarca del Alto Palancia. Para llegar hay que hacer unos 20 minutos de coche por la carretera rural que va a la Masía Ferrer.
Este majestuoso árbol cuenta con más de 1550 años de historia. En 2008 le otorgaron  el Premio al Mejor Olivo Monumental de España.

Olivera Morruda. Foto: Viajera Digiftal.

La olivera morruda de Segorbe destaca por su inmenso tronco, el cual dibuja una estampa única a través de sus gruesas y retorcidas venas. Algunas de las ramas de la olivera son tan grandes que han tenido que “apuntalarlas” para que no se rompan por su propio peso.

Contemplar la majestuosa olivera milenaria completará cualquier visita a Segorbe, uno de los pueblos más bonitos de Castellón.

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Diplomado en Turismo por la Universidad de Alicante y Licenciado en Antropología Social y Cultural por la Universidad Miguel Hernández de Elche. Le apasionan los idiomas, habiendo estudiado en la Escuela Oficial de Idiomas de Elche, Inglés, Francés e Italia. Además es Guía Oficial de Turismo por la Comunidad Valenciana.

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