Si estáis pasando unas vacaciones en la costa alicantina, os recomendamos una actividad muy chula para toda la familia. Se trata de una de las visitas que organiza Turismo de El Campello, a los jardines de Villa Marco: una visita guiada convencional en tres idiomas (castellano, inglés y francés) o una divertida visita teatralizada.
Las visitas se suelen organizar en período estival, la entrada es gratuita y el aforo limitado a 30 personas. Es necesario reservar tu entrada en la web de la Concejalía de Turismo de El Campello.
Villa Marco se encuentra en la Partida de Fabraquer de la localidad costera de El Campello, a unos 15 km. de la ciudad de Alicante, en el corazón de la turística Costa Blanca.
La actual ubicación de la casa se asienta sobre los cimientos de una antigua Torre de Vigilancia de los ataques de los piratas berberiscos muy cerca del litoral.
La casa original data del siglo XVI, una importante finca rústica en la fértil huerta alicantina. A finales del siglo XIX fue adquirida por el viticultor de origen francés René Bardin, quien adquirió la finca como segunda residencia de verano y de recreo. El comercio del vino era un negocio floreciente a finales del siglo XIX, y por aquel entonces la filoxera se había extendido por los campos franceses enfermando las vides.
Nosotros optamos por hacer la visita teatralizada el pasado domingo 10 de julio. Y desde luego que no decepciona, es divertida y a su vez ofrece datos histórico, apta para todos los públicos y con una duración de unos 50 minutos.
Cabe señalar que la casa colonial y la de los antiguos guardeses no son visitables en su interior, si lo es la pequeña capilla.
La visita comienza remontándose al año 1898 cuando René Bardin compra la casa y es aconsejado por el arquitecto Lorenzo Chápuli y el escultor alicantino Vicente Bañuls para su adecuación como residencia veraniega siguiendo la moda de la época, art nouveau, con influencias del arte colonial francés.
Otros de los personajes que aparecen son la nieta de Bardin “Lolita” o el pretendiente de ésta. Bardin acabaría siendo Cónsul de Francia en nuestro país, hasta que tuvo que exiliarse a Francia tras la Guerra Civil.
La casa-palacete tiene una superficie de 693 m2 de superficie habitable en estilo colonial francés. Tiene dos plantas más una tercera más pequeña.
Los jardines de Villa Marco de estilo versallesco están estructurados en cinco ambientes diferenciados: un jardín árabe (originariamente una huerta donde se produce el riego por inundación), un jardín histórico (alberga los ejemplares más grandes e históricos como los ficus), un jardín de acceso (la antigua entrada de carruajes con un pequeño estanque), un jardín mediterráneo (alberga plantas autóctonas) y un bosque mediterráneo con una gran pinada y un “umbracle” de hierro recubierto de jazmines.
Hay un pequeño aljibe para recoger el agua de la lluvia cubierto de formas rocosas como estalactitas y estalagmitas procedentes de las vecinas Cuevas de Canelobre en la localidad alicantina de Busot.
Otro de los puntos de interés del lugar son las dos esculturas del maestro Bañuls: “La Noche” con la cabra, la leona y una mujer; y “La Marsellesa”, una alegoría a la República Francesa, “la Liberté”, “la Egalité” y “la Fraternité”, representación de la Madre Patria.
Actualmente este hermoso lugar se utiliza para celebrar alguna boda civil privada y hasta no hace mucho para un festival de jazz al aire libre.
Para su visita es imprescindible inscribirse en la Oficina de Turismo (Teléfono: 965634606 o Email: campello@touristinfo.net).
El sitio es espectacular y es que sitios como este son idílicos para disfrutar de un gran evento como es una boda, rodeados de naturaleza, con una buena decoración especializada de manos de expertos, podría ser inolvidable.
Es un sitio precioso. Un saludo