Torino (Turín en castellano) es la cuarta ciudad más importante de Italia en población tras Roma, Milano y Napoli. Es la capital de la provincia de Piamonte, al pie de Los Alpes, y un importante centro económico del país.
La ciudad fue fundada en el año 28 a. de C. por Augusto bajo el nombre de Julia Augusta Taurinorum. De aquí el símbolo de la ciudad, el toro. De esta época conserva la disposición del centro histórico en redes ortogonales.
A partir del siglo XIII su desarrollo estuvo ligado a la Casa Real de los Saboya, lo que le facilitó ese especial aspecto ítalo-francés de palacios barrocos.
En el siglo XIX Turín se convirtió en centro propulsor de la Unidad de Italia y en 1848 en capital del nuevo reino con Víctor Manuel II. Posteriormente la capitalidad del país pasaría a Florencia y finalmente a Roma.
Si bien, en términos de turismo, ha sido históricamente considerada una ciudad industrial “gris” a la que emigraban los italianos del sur para trabajar, en la actualidad es una ciudad muy interesante para visitar. Los Juegos Olímpicos de Invierno celebrados en la ciudad alpina en el 2006 supusieron un fuerte impulso para la renovación de la urbe.
La ciudad es merecedora de una estancia de al menos 2 o 3 días en los que visitar algunos de sus museos de importancia mundial, plazas y palacios. También es una de las capitales gastronómicas de Italia. Aquí nacieron el vermouth en 1786 y la máquina de café expreso en 1844. El chocolate “la bebida de los dioses” 😉 tomado como alimento sólido también se inventó por estos lares…
Por último, Turín es uno de los polos del triángulo industrial ligado al desarrollo de la industria automovilística. Es en esta ciudad donde se celebra la importante feria bienal del Salón del Automóvil.
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Qué visitar en la ciudad de Turín.
Turín no se ve en un solo día; 48 horas te dan para visitar lo esencial, lo ideal es un estancia de al menos 3 días para visitar los grandes museos, entrar a los palacios y hacer alguna visita guiada. Nosotros estuvimos 3 noches.
La Piazza Castello: Palazzo Madama.
La Piazza Castello es el centro neurálgico y corazón de la ciudad de Turín, en pleno casco antiguo. Alrededor de ella se ubican grandes monumentos de valor artístico y cultural como el Palazzo Reale, el Palazzo Madama o el Teatro Regio.
Aquí se alza un monumento conmemorativo de la Primera Guerra Mundial, en homenaje a Emanuele Filiberto, segundo Duque de Aosta.
Una de las joyas es el Palazzo Madama construido sobre unas ruinas romanas de las que se conservan las torres de una antigua puerta. Su uso ha variado a lo largo de los siglos de castillo medieval a palacio barroco donde habitaron personajes de la talla de María Cristina de Saboya (viuda de Víctor Amadeo II) y Giovanna de Saboya.
La influencia de la Casa Real de Saboya en la ciudad dejó su impronta en lujosos palacios barrocos repartidos por el núcleo histórico de Turín.
Actualmente es la sede del Museo Cívico de Arte Antiguo de Turín. Entre sus colecciones encontrarás cerámicas, esculturas y grabados del arte europeo e italiano.
Il Palazzo Reale.
El Palazzo Reale de Torino se ubica también en la Piazza Castello. Fue construido en el año 1646 como palacio de la casa de Saboya.
El conjunto está declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO y razones no le faltan. Se pueden visitar entre otras estancias:
- Los antiguos apartamentos del Rey, cuyas estancias están bellamente ornamentadas y sus techos tallados y enchapados en oro, nácar y marfil en una mezcla de estilos que van desde el neoclásico, pasando por el rococó y el barroco.
- La Armería Real y su colección de armaduras, ballestas, lanzas, etc.
- La Galería Sabauda con su colección de pinturas de los siglos XVI al XX.
- Los Jardines Reales del siglo XVII en estilo francés, de entrada libre, muy bien cuidados.
Desde aquí se divisa la silueta de uno de los edificios construidos en la época fascista en estilo racionalista, la Torre Littoria, hoy oficinas y conocido con el sobrenombre de “il dito di Mussolini”.
La Chiesa di San Lorenzo.
La Iglesia de San Lorenzo se ubica en la Plaza del Castillo junto al Palacio Real, pero a pesar de su valor patrimonial suele pasar desapercibida dentro del urbanismo de la plaza y sólo su gran cúpula octogonal emerge.
Se trata de uno de los proyectos más ambiciosos del arquitecto Guarino Guarini. Se la apoda «Real» por deseo de la Casa de Saboya y porque se veía como la iglesia de la casa real.
De particular valor es el altar mayor, que data del año 1680 uno de los más importantes de la Italia septentrional por su estilo innovador; dentro de este mismo altar, Guarini, que era fraile, celebró la misa de consagración de la iglesia.
La Piazza San Carlo: Iglesias de Santa Cristina y San Carlo.
Nos encontramos en otra de las históricas plazas de Turín, la Piazza San Carlo que cuenta con 12.500 metros cuadrados de superficie. Es un lugar estupendo para tomar un café cappuccino o un gelato mientras admiramos su preciosa arquitectura.
Es un lugar donde se celebran grandes eventos culturales y donde los “tifosi” de la Juve, uno de los equipos más laureados de Italia, celebran sus títulos.
Pero la plaza también ha sido testimonio de uno de los episodios más desagradables de la historia contemporánea de Italia. Sucedió en 1848 con el cambio de capitalidad en favor de Florencia, hecho que provocó una gran revuelta y como consecuencia de ello la muerte 184 ciudadanos por parte de las autoridades.
En un rinconcito de uno de los pórticos de la plaza encontraremos el símbolo de la ciudad de Turín, el famoso “toro”. Cuenta la tradición que si se le dan tres vueltas con los ojos cerrados volverás a Turín.
Sus dos estrellas son “Las Gemelas de Turín”, dos iglesias casi idénticas a excepción de una torre. Hablamos de las iglesias de Santa Cristina (barroca) y San Carlo Borromeo (neoclásica).
Otros lugares de interés son el Palacio Guido Villa, el Palacio del Borgo y la escultura ecuestre Monumento a Emanuele Filiberto, duque de Saboya.
A las espaldas de la Plaza de San Carlo y cruzada por Via Roma, una de las arterias principales encontramos la Piazza C.L.N. (Comité de Liberación Nacional). El diseño de esta plaza data de 1935, período de auge del fascismo en Italia. Los pórticos son sobrios y robustos del gusto de la época para impresionar, de estilo racionalista italiano en piedra y mármol de Carrara.
Cuando se construyó la plaza la idea original era la de colocar cuatro esculturas: una de Mussolini, otra de Vittorio Emanuele III de Saboya y dos alegorías a los ríos que atraviesan la ciudad de Turín, el Po y el Dora Riparia. Afortunadamente solo llegaron a colocarse en la plaza las dos esculturas alegóricas a los ríos, el más largo de Italia, el Po, y el segundo más largo del Piamonte, el Dora.
Via Roma es en la actualidad una de las principales arterias comerciales de la ciudad. En época fascista fue una de las principales para las marchas militares. Todavía podemos observar inscripciones en latín en alegoría al movimiento patriótico italiano.
De entre los locales históricos destacamos Café Torino que abrió sus puertas hace 120 años. Su estilo es liberty, cuya decoración se basa en la naturaleza con flores y plantas. Aquí podemos adquirir el “gianduiotto” la típica chocolatina piamontesa cuya forma es similar a la de un barco boca abajo y envuelta en papel dorado o plateado. Otro dulce típico son las galletitas “I bacci di Dama” ideales para tomar con el té o el espresso.
Otro producto típico “bicerin“, una bebida caliente a base de café expreso, chocolate y crema de leche que toma su nombre de los pequeños vasos sin asas en los que se servía, nacidos en 1763 en la localidad homónima.
En la misma calle se ubica la Galleria de San Federico construida en 1931 en Art-Decó al estilo de la célebre Galería Víctor Manuel de Milán. Posee muchos locales de moda y el histórico Cine de Lux.
Il Duomo di San Giovanni Battista.
El templo más importante de la ciudad es la Catedral de San Giovanni Battista, en italiano Il Duomo. Este bonito templo fue construido entre los años 1491-1498 en estilo renacentista. Su campanario medieval construido exento en 1470 fue sobre levado en el 1720.
Es la sede del Obispado de Turín y conocida mundialmente por albergar el Sudario de Turín o Sábana Santa de Jesucristo en la conocida como Cappella della Sacra Sindone revestida en mármol negro.
Esta tela de lino según los evangelios habría cubierto el cuerpo de Cristo. Mide 4,40 metros de largo por 1,10 de ancho y en ella se aprecia el rostro de Cristo en su camino a la cruz. Dentro del templo podemos ver una imagen del sudario pero no el original que se encuentra custodiado en una urna de plata y fue colocado en 1694. En rarísimas ocasiones se expone al público.
La Sacra Sindone o Sábana Santa es un reclamo espiritual pero también turístico para la Catedral de San Giovanni Battista, Patrón de la ciudad.
Hay que decir que la Iglesia Católica no se ha pronunciado sobre la autenticidad del sudario.
La Porta Palatina.
No muy lejos de la catedral encontraremos la que fuera una de las cuatro entradas de ciudad romana de de Julia Augusta Taurinorum, la conocida como Porta Palatina. Este monumento está compuesto por un acceso central con dos entradas para carruajes, dos peatonales de época romana y dos torres con almenas añadidas posteriormente en época medieval. Para pasar por esta puerta había que pagar impuestos.
Parte del pavimento que podemos apreciar tras la puerta es original de la época romana, se pueden incluso observar las marcas de las ruedas de los carros que la cruzaban.
En la actualidad solo quedan dos de las puertas, ésta y la Puerta Decumana.
El conjunto monumental se ubica en el interior del Parque Arqueológico Torres Palatinas. El nombre por el que se conoce a la torre ha ido cambiando a lo largo de la historia. El actual se debe al monarca de los lombardos, Agilulfo quién se estableciera en la ciudad en el año 590. Su residencia palaciega se ubicaba muy cerca de la puerta y era conocida con el nombre de Palatium.
Otros restos de la época romana son las ruinas del Teatro Romano delante del Palazzo Reale.
El Museo Egipcio.
¿Sabías que en Turín se encuentra el segundo museo dedicado al arte egipcio más grande del planeta?. La colección del Museo Egizio di Torino fundado en 1824 incluye estatuas, papiros, sarcófagos y momias, incluso de gatos!!. Todo repartido en cuatro plantas. Entre las piezas más codiciadas exhibidas encontramos la tumba de Kha y Merit (1420-1375 a. de C.) y el Templo rupestre de El-Esija (1500 a. de C.).
Te recomendamos que adquieras las entradas con antelación y ¿por qué no? que reserves una visita guiada a través del enlace que te compartimos. La entrada no es económica pero merece la pena pasar un par de horas en sus salas.
El museo se ubica en el histórico Palacio de la Academia de la Ciencia construido en un principio como colegio para la nobleza turinesa.
La Mole Antonelliana y el Museo del Cinema.
Uno de los símbolos de la Turín moderna es la Mole Antonelliana, excelente mirador y uno de los edificios más altos de la ciudad (167 metros). Podemos subir a su ascensor panorámico que nos conducirá a la plataforma de la torre para fotografiar el skyline de Turín.
Inicialmente fue construido para albergar una sinagoga pero en 1869 ante la falta de fondos de la comunidad judía de la ciudad pasó a manos del ayuntamiento.
Actualmente alberga en su interior el Museo Nacional del Cine de Turín que cuenta con una completísima colección de películas de todos los tiempos.
En sus salas haremos un interesante recorrido por la historia del cine mundial e italiano desde sus orígenes.
La Piazza Carignano.
Y de plaza en plaza llegamos a otra plazoleta histórica que data del siglo XVIII, la Piazza Carignano, donde se ubica el Palazzo Carignano en estilo barroco. El palacio construido en piedra roja es obra del arquitecto Guarino Guarini para albergar el primer Parlamento de Italia. Actualmente es la sede del Museo del Resurgimiento Italiano sobre la historia del país.
La Piazza Vittorio Veneto.
A orillas del río Po se encuentra esa inmensa plaza donde los turineses se reúnen para tomar el aperitivo que en Italia consiste en una bebida con o sin alcohol para estimular el apetito a media tarde (hora del tardeo), a nuestra hora de la merienda. Entre los aperitivos más comunes para los italianos están: el Aperol con su particular color naranja, el Martini, o el Campari. En 1786 se inventó el vermut en esta ciudad italiana.
Se suele acompañar con “antipasti”, nuestras tapas más o menos, aunque no tan ricas 😉 a base de embutido, alitas, queso,…
Il Santuario della Consolata.
El Santuario della Consolata está dedicado a la Patrona de Turín, Nuestra Señora la Virgen de la Consolación. Es un templo de grandes dimensiones, obra maestra del arte barroco piamontés que cuenta con la dignidad de basílica menor. Fue diseñado por los arquitectos Guarino Guarini, Filippo Juvarra y Carlo Ceppi bajo encargo de la duquesa Maria Giovanna Battista di Savoia-Nemours en el año 1678 englobando la antigua iglesia románica de Sant’Andrea, documentada ya en el siglo X.
En su ingreso podemos apreciar los restos de una antigua torre que data del siglo V. En el campanario está instalada la campana más grande de la región.
La Villa della Regina.
La familia real de los Saboya contaba con varias residencias repartidas y Villa della Regina (s. XVII) ubicada en las alturas en el barrio Borgo Po es una de ellas.
Fue construida a instancias de Maurizio di Savoia, Príncipe de Oneglia, y luego pasado a su esposa Ludovica di Savoia, y elegida como residencia de verano primero por Anna Maria d’Orleans y luego por Polissena d’Assia, reinas de Cerdeña.
En el año 1997 fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Puedes llegar fácilmente a pie desde Piazza Vittorio Veneto, o en autobús. Sin embargo, es necesario subir una subida bastante empinada para llegar a las puertas laterales por las que se accede.
Il Monte dei Capuccini.
En la orilla opuesta del río Po sobre una colina a 325 metros de altura encontramos el Monte de los Capuchinos, interesante punto panorámico desde el que se obtienen las mejores fotos de Turín y de los cercanos Alpes.
Se puede subir a pie, nosotros lo hicimos, en unos 20 minutos. También puedes tomar los autobuses 33 o 52.
Aquí encontraremos la Iglesia de Santa María del Monte dedicada a la Virgen. El templo comenzó a construirse en 1584 a los planos de Ascanio Vitozzi y fue consagrado en 1656. El edificio tiene un plano central en forma de cruz griega y está coronado por una cúpula con una base octogonal.
Junto a la pequeña iglesia encontraremos il Museo Nazionale della Montagna Duca degli Abruzzi, que documenta el desarrollo del alpinismo y la historia de algunas expediciones polares. No olvidemos que nos encontramos en una región alpina.
La Basilica di Superga.
En la misma orilla que el Monte dei Capuccini encontramos la Basílica de Superga edificada en el siglo XVIII por Víctor Amadeo II de Saboya en lo alto de la colina del mismo nombre.
El arquitecto fue Filippo Juvarra, que usó una mezcla entre la arquitectura clasicista y el barroco propio del momento.
La iglesia alberga las tumbas de muchos de los príncipes y reyes de la Casa de Saboya, entre ellos el Monumento a Carlos Manuel III (1733).
Il Parco del Valentino.
De regreso a la orilla derecha del río Po encontrarás uno de los pulmones verdes de la ciudad de Turín, el Parque Valentino, con más de 42 hectáreas de extensión. Un lugar donde evadirte del estrés de la gran ciudad tumbándote en el cuidado césped a leer un buen libro o hacer un picnic. Si no llevas tu propia comida no hay problema ya que encontrarás varios quioscos donde venden alimentos y bebidas.
Cuenta con carriles bici interiores y es lugar transitado por deportistas. Hay numerosas fuentes, algunas muy monumentales como la Fontana dei Dodici Mesi y el Arco del Valentino.
Dentro del parque se ubica el Castello de Valentino construido en 1620 por el duque Manuel Filiberto de Saboya. De estilo italiano es su fachada de ladrillos rojos. Desafortunadamente no es visitable ya que actualmente es la sede de la Universidad de Arquitectura.
Il Borgo Medievale.
Dentro del Parque Valentino encontrarás este poblado medieval creado en 1884 para una exposición que tuvo lugar en la ciudad. Il Borgo Medievale trata de recrear una antigua ciudad del medievo (s.XV) con su castillo, sus plazas, callejuelas estrecha, puente levadizo e iglesias de diferentes regiones de Italia. ¡Es como estar en un parque temático medieval 😉!
El Museo Lavazza.
Todo “coffee lover” ha probado en alguna ocasión una buena taza del café italiano Lavazza ☕. Pues es aquí en Turín donde se fabrica este delicioso café y donde puedes visitar en el barrio de Aurora el Museo Lavazza.
Se trata de un museo muy didáctico apto para toda la familia. Para comenzar en recepción te harán entrega de una tacita de cerámica de café Lavazza que será la protagonista de todo el recorrido por las diferentes salas del museo. La taza será la llave para activar imágenes, sonidos y juegos a lo largo del museo.
El fundador de Lavazza Luigi creó en el año 1895. Para ello pidió un préstamo de 50 liras para invertir en un negocio propio: un pequeño almacén. Históricas máquinas de producir el café, la evolución del diseño en sus famosas latas y la publicidad son algunos de los aspectos que se tratan en el museo.
Al final del recorrido con tu entrada podrás tomar un delicioso café Lavazza en cualquiera de sus variedades. Por falta de tiempo, no pudimos hacer la visita guiada, pero es posible si la reservas con antelación.
Estadio de la Juventus.
Los futboleros ⚽ no pueden dejar de visitar la casa de la Juventus de Turín, el estadio Allianz Stadium inaugurado en el 2011.
Como otros grandes clubes de fútbol europeos se ofrece un tour guiado por las instalaciones del estadio (sala de prensa, vestuarios, a pie de campo,…) y a la sala de trofeos de uno de los equipos más laureados de Europa, conocido internacionalmente como “la vecchia signora”.
El Cementerio Monumental de Turín.
Como habéis podido comprobar en otros artículos, nos gusta visitar los cementerios históricos de las ciudades y apreciar el arte fúnebre que en ellos se expone.
El Cimetero Monumentale di Torino se encuentra en el barrio periférico de Regio Parco junto a la zona verde del Parco Colletta. Fue construido en 1827 y es un lugar muy agradable para dar un paseo entre tumbas y mausoleos escuchando el sonido de los pajarillos y la paz que transmite.
Mercato di Porta Palazzo.
Si sois amantes de los mercadillos al aire libre en las inmediaciones de la Piazza della Repubblica en el barrio de Borgo Dora, encontraréis el Mercado de Porta Palazzo. En un espacio abierto de casi 50.000 metros cuadrados encontraréis de todo: ropa, artículos de menaje, frutas y verduras, quesos y patés 😋…
Como en toda gran ciudad tenéis que llevar cuidado con los carteristas, ya sabéis donde hay tumultos se congregan los amantes de lo ajeno.
Lo que más nos gustó fue el mercado cubierto dedicado completamente a la gastronomía local, aunque también es un espacio cultura para exposiciones. Las pizzas y los platos de pasta como los tallarines de huevo no podían faltar. También encontraréis locales donde cocinan un buen risotto o el vitello tonnato, plato local a base de ternera con una salsa verde a base de ajo, perejil, aceite, huevo y anchoa, ¡casi nada!.
Turín es la primera ciudad italiana que visitamos Yolanda y yo en nuestra vida, hace casi 25 años ya, así que le tengo mucho cariño.
Qué decirte de Home Exchange, somos muy muy fans…mucho
Gracias por dejar un comentario. Turín es una gran ciudad con muchas posibilidades y tendréis que regresar tarde o temprano. Un saludo
Nos encanta poder viajar con Homeexchange, la verdad es que son todo ventajas.
No conozco la ciudad, pero me ha encantado. Desconocía que tuviera tantísimo para ver. Me han entrado ganas de conocerla.
Un abrazo
Gracias por comentar. Guárdate Turín, os va a encantar! Un saludo.
Buena selección.
Nosotros estuvimos solo un rato, por la noche y en verano, y pasamos mucho calor. Creo que es una ciudad que tendríamos que visitar en invierno, nos gustaría más. Algún día volveremos.
Hola, gracias por comentar. Es cierto que en verano hace calor, la sufrimos, pero nada que no se pueda apagar con un gelato o un aperol fresquito 🙂
¡Qué recorrido tan completo. Esa una guía genial para disfrutar de la ciudad!
Me alegro de que te haya gustado. Gracias por comentar.
Tenemos pendiente el próximo verano un viaje al norte de Italia. Visitaremos Turín gracias a tus consejos.
Hola, pues estáis tardando, je je. Gracias por comentar. Un saludo.
Soy un apasionado de Italia y tengo pendiente visitar Turín. Me ha encantado el post. Muchas gracias.
Hola, gracias a ti por comentar. Me alegro que te guste.
Tengo pendiente visitar esta ciudad y le tengo muchas ganas. Me he leído el post con mucho entusiasmo y me lo guardo porque me vendrá muy útil. Gracias por compartir.
Hola, me alegro que te haya gustado, ahora toca descubrir Torino!
No teníamos ni idea que Turín tuviera ese patrimonio histórico y tantos lugares declarados Patrimonio de la Humanidad.
Hola Antonio, Turín ha sido incluso capital de Italia!! aunque por breve tiempo. Una ciudad apasionante. Un saludo.
Turín es una de mis ciudades favoritas de Italia! He estado 3 veces y me encanta! Es mucho menos popular que otras ciudades vecinas, pero es muy interesante!
La verdad es que nos gustó muchísimo.
Qué buena pinta tiene la ciudad. Estuvimos en Milán y no nos acercamos a Turín, una excusa para regresar.
Gracias por dejar un comentario. Ya no tienes escusa para visitar Torino. Un saludo
¡Un gran artículo! He anotado varias cosas para mi próximo viaje a esta ciudad. Mil gracias.
¡Cómo nos encanta recibir este tipo de comentarios!. Te recomiendo el free tour, tienes el enlace en el artículo. Feliz Navidad!!